Los trabajos están cambiando junto con la tecnología
A medida que la tecnología avanza, nuestro entorno también lo hace. No es sorpresa que la tecnología ha permitido al ser humano facilitar su permanencia en este planeta. Esto se ha traducido en un cambio estructural tanto de cultura como de trabajo, lo que ha llevado a crear dos pensamientos totalmente controversiales.
¿Las IA reemplazarán los humanos? ¿La tecnología eliminará todo tipo de trabajo? son preguntas (y afirmaciones) que han surgido a través del cambio tecnológico que ha atravesado nuestra sociedad, y que han generado temor y rechazo a esta ola de tecnológica presente en nuestro día a día.
La programación como comienzo de un todo.
Desde el primer algoritmo creado en 1883, y su continuo uso durante mitad del siglo XX, la programación ha sido un gran apoyo en el avance de la tecnología. Gracias a ella, la humanidad pudo crear y hacer cosas que no creíamos posible hace un par de siglos atrás.
Es un hecho que la programación marcará un punto de inflexión en la historia de la tecnología, pues, es un sector que evoluciona rápidamente y se ha asociado con el progreso. Así, la programación está haciendo posible la aparición de nuevas tecnologías, nuevas formas de automatizar la vida cotidiana y seguramente nuevas formas de ayudar varias disciplinas como lo es la medicina.
Entonces, ¿Cuál será el futuro de los trabajos?
Con la programación como premisa y el avance de las IA, se ha fomentado ideas inciertas acompañadas de preocupaciones sobre los efectos de estas tecnologías en los futuros trabajos. Haciendo que se creen especulaciones fuera de la realidad o que predicen efectos que no del todo predecibles.
Para empezar, hay que tener en mente que las nuevas tecnologías crean y destruyen puestos de trabajo, de formas que no son predecibles al principio. Si bien, es verdad que algunos trabajos que conocemos desaparecerán, otros se crearán al mismo tiempo.
Este impacto generalizado de la automatización también cambiarán las tareas dentro de los puestos de trabajo. Es decir, las tareas laborales cambiarán a medida que aumenta la automatización en los próximos años.
Entonces, en lugar de pensar en los avances tecnológicos y la automatización como una competencias entre humanos y máquinas, necesitamos acentuar el potencial de los avances tecnológicos para mejorar los esfuerzos humanos.
La automatización podría aumentar la productividad económica.
Según algunos análisis, la mayoría de las ocupaciones tienen algunas tareas que son adecuadas para el machine learning, pero pocos o ningún trabajo consisten en tareas adecuadas para el.
Es decir, muchos trabajos tendrán que rediseñarse significativamente, ya que el machine learning se hace cargo de algunas, pero no de todas las tareas dentro del trabajo. Esos análisis encontraron que pocos trabajos son completamente automatizables, pero muchas tareas sí lo son. Como algunas tareas físicas en entornos predecibles, desde preparar comida rápida hasta operar una maquinaria.
Entonces, es cierto que la automatización reduce la demanda de personas para realizar algunas tareas, pero así mismo aumenta la demanda de otras tareas. La automatización también impulsa la creación de nuevas tareas, y aunque esta misma desplaza a algunos trabajadores, también genera un aumento en la productividad que puede ser beneficioso en la productividad económica y a su vez, aumentar la demanda de trabajo.
Sin embargo, el que se pueda disfrutar de los beneficios de una sociedad estable que ofrezca oportunidades para todos depende implícitamente de nosotros y de crear estructuras que permitan que la sociedad se adapte de manera flexible a los rápidos cambios tecnológicos que pueden ser beneficiosos para la sociedad.
Los empleos YA están cambiando y las plataformas de talento digital son de gran ayuda.
Actualmente, la gran mayoría de las actividades que pueden automatizar ya lo están haciendo. La globalización y el avance tecnológico han traído beneficios pero también han impactado en algunos sectores y en algunos puestos de trabajo.
Sin duda alguna, las nuevas tecnologías pueden cambiar mucho la forma en la que las personas trabajan. Incluso conduciendo al desempleo de personas que no están capacitadas para trabajos tecnológicos.
Esto a su vez, genera competencia laboral. Pues los trabajadores pocos calificados competirán contra la gran oferta de trabajadores poco calificados. Mientras que los trabajadores altamente calificados que trabajen en tecnología se beneficiarán de este cambio.
Sin embargo, las plataformas digitales tienen el potencial de mejorar las formas en que los trabajadores y los trabajos se combinan. También pueden acelerar el proceso de contratación y reducir el desempleo, así como colocar a las personas adecuadas en los trabajos adecuados, aumentando la productividad y la satisfacción laboral.
Se están creando nuevos trabajos en industrias que la mayoría de nosotros ni siquiera podemos imaginar, y nuevas formas de generar ingresos. Parece que la tecnología creará más puestos de trabajo y también ayudará a la sociedad a encontrar nuevas formas de resolver problemas.
Por otro lado, es necesario comprender que la tecnología no está al alcance de todos, y aunque el avance tecnológico y la adaptación de tecnologías puede aportar un enorme valor económico, también exige afrontar retos importantes en el futuro del mundo laboral.
La educación y el acceso a la tecnología es un paso fundamental para que el cambio no sea negativo para algunas personas y así, no solo ayude al crecimiento de la sociedad sino también al crecimiento de los empleos tecnológicos.
Por todo esto no debemos temer a la tecnología, en cambio, debemos apoyar su crecimiento.